Desde finales de enero ya voy a la guardería. Tengo siete compañeros más, a los que trato de robar el chupete en cuanto se adormecen en la hamaquita, y me lo paso bastante bien. En un principio iba a empezar en la clase de los bebés de mi edad pero, como estoy muy espabilado, me han pasado directamente con los que cumplen un añito durante el primer trimestre. Mi maestra se llama Bianca y me gusta mucho. No echo nada de menos a mi mamá. Cuando me deja en clase y se marcha, no lloro, aunque me alegro cuando la veo que viene a recogerme. Sólo voy cuatro horas por la mañana, pero es tiempo suficiente para que yo me entretenga un rato y mi mamá pueda trabajar y hacer algo sin tenerme alrededor.
Aquí os dejo dos fotos: una del primer día que fui a la guardería y otra de lo primero que hice allí: ¡un roscón de San Valero!
Aquí os dejo dos fotos: una del primer día que fui a la guardería y otra de lo primero que hice allí: ¡un roscón de San Valero!
No hay comentarios:
Publicar un comentario