lunes, 18 de mayo de 2009

¡de un tirón!

Ayer dormí toda la noche de un tirón. Me acostaron a las diez y media y no he dicho ni mu hasta las ocho de la mañana. Mi padre no cabía en sí de gozo. Mi madre tampoco, pero la verdad es que ni se ha enterado. Ahora resulta que la pobre es insomne y, aunque yo duerma plácidamente, ella no pega ojo hasta las tres o las cuatro de la madrugada. Dice que ha debido de acostumbrarse a dormirse conmigo en la teta y que hasta que no me despierto la primera vez, no le entra el sueño. Eso sí, una vez que se duerme, puede terminarse el mundo que ella ni se inmuta. Por eso estos últimos siete meses mis papás han conseguido sobrellevar, más o menos, las noches: hasta las cuatro se hacía cargo de mis despertares mamá y, a partir de las cuatro, papá.
Pero esta noche ya os digo que ha sido distinta. He dormido casi diez horas de un tirón, como un machote. Eso sí, para que mis padres no se crean que esto se va a convertir en una costumbre, hoy ya me he despertado dos veces, y tengo pinta de volver a las andadas. Pero, oye, que les quiten lo bailao.

2 comentarios:

  1. Muy bien, Mateo. Así se hace!

    A ver si vas quedándote con todos estos trucos para contárselos a Juan en su momento.

    Besos.

    ResponderEliminar
  2. Uy... yo se los contaré, pero mejor os irá si los descubre él solito cuanto antes...

    ResponderEliminar